Para muchos la palabra migración se relaciona directamente con personas que se trasladan de su lugar de origen a otro país o región, por causas diversas. Sin embargo, podemos cambiar un poco el contexto y hablar del traslado de las operaciones bancarias tradicionales a los medios electrónicos, sin dejar de referirnos a la migración.

En este caso el motivo de migrar las transacciones bancarias tradicionales resulta claro para el sistema financiero: un mejor y oportuno manejo de las operaciones que los clientes realizan día a día, bajo la comodidad de un medio electrónico y la seguridad que brinda no poseer cantidades grandes de dinero en efectivo siempre con nosotros.

El termino de migrar transacciones, como muchos otros que persiguen facilitar las operaciones diarias de los individuos, se ha intensificado con la globalización, en especial, con la globalización financiera. Es oportuno recordar que la migración transaccional ha resultado ser una ventaja para los países que se han dedicado a elevar sus niveles de bancarización.

La migración de transacciones no solo libera de costos importantes al sistema financiero, pues también le permite posicionarse en estándares más elevados a nivel tecnológico, lo que genera mayores ingresos en la medida que se capta más clientes que confían en un sistema cada vez más automatizado y seguro.

La seguridad es crucial cuando se trata de cambiar una plataforma tradicional por una automatizada. Como medio tradicional dentro del sistema financiero se encuentran las agencias con un alto número de cajas atendidas por personas. No significa que por la migración de transacciones hacia los canales tecnológicos (cajeros automáticos, puntos de venta, internet banking, banca móvil, entre otros) hayan dejado de existir los medios tradicionales, sino que más bien se han mejorado y se han dedicado a establecer una relación más personalizada con el cliente, con operaciones que realmente lo requieren y que no pueden solucionarse de manera electrónica.

Realizar operaciones bancarias resulta ser menos preocupante o estresante, pues la rapidez y la efectividad son cada vez más imperantes al realizarlas a través de medios electrónicos. No se debe olvidar que la seguridad de las operaciones bancarias está garantizada en muchos de los medios electrónicos, pues la carencia de la misma afecta la protección no solo del cliente sino del sistema financiero como un todo.