Desde el inicio de 2016, la capital de Corea del Norte, Pyongyang ha acelerado el desarrollo de programas balísticos y nucleares. Desde entonces, la ciudad ha sido una de las principales ubicaciones a observar por los Estados Unidos ya que representa la amenaza número uno en la región a causa de su “irresponsable, desestabilizador e imprudente programa de misiles y de la continuación (de sus investigaciones) con vistas a disponer de armas nucleares” (comandante Dave Benham, vocero del comando norteamericano en el Pacífico).
Ante esta situación, el presidente estadounidense Donald Trump, a menos de 48 horas después del ataque estadounidense contra una base aérea siria, decidió enviar el portaaviones 'USS Carl Vinson' y su flota a aguas cercanas a la península coreana, mencionando claramente la amenaza nuclear que representa Pyongyang. El presidente estadounidense quiere estudiar "todas las opciones para terminar con la amenaza" nuclear norcoreana y aseguró que el envío de un portaaviones es una medida de precaución.
Por otro lado, la reciente visita del portaaviones estadounidense a Pyongyang tiene lugar inmediatamente después de la primera cumbre entre Donald Trump y el presidente de China, Xi Jinping, luego de que Corea del Norte realizara antes de la cita un nuevo disparo de misil balístico, que el miércoles cayó en el mar de Japón.
Trump y su secretario de Estado insistieron que, en caso de ser necesario, Estados Unidos está dispuesto a actuar por su cuenta en contra del régimen de Pyongyang. Una amenaza que parece incluso más creíble luego del ataque estadounidense contra la base aérea Siria de la que supuestamente despegaron los aviones sirios responsables, según Washington, de un ataque con armas químicas contra el pueblo de Jan Sheijun. -Corea del Norte calificó el ataque norteamericano de "acto de agresión intolerable"-.
Fuente: El Comercio
Ante esta situación, el presidente estadounidense Donald Trump, a menos de 48 horas después del ataque estadounidense contra una base aérea siria, decidió enviar el portaaviones 'USS Carl Vinson' y su flota a aguas cercanas a la península coreana, mencionando claramente la amenaza nuclear que representa Pyongyang. El presidente estadounidense quiere estudiar "todas las opciones para terminar con la amenaza" nuclear norcoreana y aseguró que el envío de un portaaviones es una medida de precaución.
Por otro lado, la reciente visita del portaaviones estadounidense a Pyongyang tiene lugar inmediatamente después de la primera cumbre entre Donald Trump y el presidente de China, Xi Jinping, luego de que Corea del Norte realizara antes de la cita un nuevo disparo de misil balístico, que el miércoles cayó en el mar de Japón.
Trump y su secretario de Estado insistieron que, en caso de ser necesario, Estados Unidos está dispuesto a actuar por su cuenta en contra del régimen de Pyongyang. Una amenaza que parece incluso más creíble luego del ataque estadounidense contra la base aérea Siria de la que supuestamente despegaron los aviones sirios responsables, según Washington, de un ataque con armas químicas contra el pueblo de Jan Sheijun. -Corea del Norte calificó el ataque norteamericano de "acto de agresión intolerable"-.
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