Diciembre es un mes bastante peculiar. El singular ambiente festivo que invade las calles y el sinnúmero de tradiciones heredadas por generaciones hacen del último mes del año todo un fenómeno desde muchos puntos de vista. Quizá la particularidad más evidente de esta época es el aspecto monetario. Los reencuentros, cenas y fiestas navideñas incitan el consumo masivo de las personas, pero ¿qué tanto? A continuación, un análisis del comportamiento de las principales variables de ingresos y gastos de los dominicanos en diciembre.
Las ventas de las empresas en diciembre superan el promedio del resto del año en más de RD$70 mil millones (30% más). Efectivamente, el total de billetes y monedas que tienen los dominicanos en la calle en diciembre totaliza regularmente RD$8 mil millones más que el monto que circula de enero a noviembre.
Pero ¿por qué se compra tanto en esta fecha?, ¿la razón será porque las personas postergan su consumo durante todo el año o es esto consecuencia del ingreso extra del mes?
El hecho de que los depósitos de ahorro de las personas no suelan disminuir en diciembre, es indicio de que el comportamiento del consumo privado no es resultado de un aplazamiento de las compras. Sin embargo, existen otras razones para creer que sí. Los alquileres de viviendas, la construcción y el comercio de vehículos incrementan cuantiosamente en el doceavo mes y como estas no son actividades ligadas a tradiciones navideñas, sino que son parcialmente incentivadas por las facilidades crediticias que se otorgan, es posible afirmar que los dominicanos posponemos el consumo de ciertos bienes y servicios hasta diciembre. De hecho, las ventas de construcción en diciembre pueden duplicar las del promedio mensual de los demás meses, mientras que la compra de vehículos y el alquiler suelen ser 30% y 60% más que dicho promedio en el periodo de análisis.
No obstante, es incuestionable que el pago de la regalía es un factor clave en la dinámica del comercio de fin de año. Cabe destacar que el salario de navidad o “el doble” es el resultado de retenciones que le hace una empresa a sus empleados durante todo el año. De esta manera, se acumula la doceava parte del salario neto de los trabajadores y se les entrega al finalizar el año. Este pago extra aumenta el poder adquisitivo de los empleados y se refleja en una subida de los gastos.
A pesar de que durante 2017 la economía ha estado más lenta que en años anteriores, el mes de diciembre se vislumbra promisorio. Los incentivos al consumo han alcanzado niveles máximos históricos y ya algunas variables comienzan a reflejarlo. Además, el aumento al salario mínimo del sector privado aplicado durante este año, se traducirá en aumentos del pago de regalía pascual.