Diariamente como agentes económicos nos enfrentamos a numerosas incertidumbres que nos hacen tratar de tomar la mejor decisión a nuestra conveniencia. Hay ocasiones en que nuestras decisiones afectan los de otros agentes de manera positiva o negativa, y esto se conoce como el concepto de externalidad. Este se define como un efecto indirecto que sufre un tercero por alguna decisión, no obstante, este participe en la misma. Las externalidades influyen en las oportunidades de consumo y de inversión de terceros, perjudicándolos o beneficiándolos.
Existen dos tipos de externalidades, las positivas y las negativas. Las externalidades negativas suceden cuando los costos privados son inferiores a los costos sociales, es decir, cuando afecta de manera negativa al tercero. Por ejemplo, se acaba de inaugurar una planta de carbón, y empieza a generar carbón el día de hoy. A medida que pasa el tiempo los residuos de la operación se convierten en desechos tóxicos que contaminan al medioambiente. Estos desechos provocan que el medioambiente que rodea a la planta de carbón se deteriore. De manera que indirectamente produce una externalidad negativa al medioambiente. Normalmente estos son las externalidades negativas más comunes.
Las externalidades positivas suceden cuando la rentabilidad privada es superior a la rentabilidad social, es decir, cuando afecta de manera positiva al tercero. Digamos que te encuentras en una casa viviendo varios años. En uno de esos años inauguran un restaurante cerca, luego un supermercado, luego una gasolinera, produciendo así que el valor del terreno donde vives se revalorice cada día más, generando que tú casa tenga un valor monetario superior.
Las externalidades son uno de los muchos factores que obligan al gobierno a enfrentar cada vez más los efectos de la economía. Algunas de las principales acciones que utilizan los gobiernos para hacer frente a las externalidades son los impuestos, cargos por emisiones y permisos negociables. Es necesario saber que estos efectos indirectos no afectan el precio, sino los beneficios y costos de los terceros.