Al momento de participar en una transacción de comercio internacional, uno de los principales acuerdos que se debe definir entre las partes es el Precio de Libre a Bordo (FOB, por sus siglas en inglés). Esto se refiere al precio que define el vendedor que incluye los costos de la mercancía y de transporte hasta el puerto de salida.
El precio FOB excluye otros componentes que inciden sobre el precio final que pagan los consumidores como costos de embarque y desembarque, seguro marítimo, flete, impuestos (específicos y/o ad valorem), márgenes de comercialización, entre otros.
De manera general, FOB se refiere a un esquema contable en donde se define la responsabilidad de la mercancía en distintas etapas del proceso de transporte. Este esquema es el más utilizado a nivel internacional porque les permite a los compradores una mayor flexibilidad sobre los costos de transporte, el seguro y el estatus de la mercancía.
De igual manera existen otros esquemas de entrega de propiedad y de definición de precios de las mercancías como Ex-Works (EXW), Costo y Transporte (CFR), Costo Seguro y Transporte (CIF), Entrega al lugar (DAP) y Derecho de Entrega Pagado (DDP).
Dependiendo del esquema seleccionado, el precio que deberá pagar el comprador será distinto. Debido a la menor participación del vendedor sobre el proceso entrega, el esquema FOB implica el menor costo al momento de compra (el comprador de igual manera incurrirá en estos costos por su propia vía). Lo más importante es conocer los distintos esquemas y saber cuál se acomoda mejor a las necesidades de las partes para tener una transacción exitosa.