En el informe MacroTendencias de esta semana, vemos el resultado de las dinámicas entre las variaciones en los indicadores macroeconómicos y la política monetaria, donde los precios externos se han mantenido relativamente estables limitando su impacto sobre los cambios en el panorama actual.
En el mercado monetario y de divisas, se observa una depreciación del peso levemente ascendente y un aumento de las tasas de interés. La depreciación actualmente se encuentra estable en un 2.4%, posiblemente para acabar en un 5% para el cierre del año, mientras el incremento en las tasas de interés se ha visto principalmente en la tasa activa, incrementando su brecha con la tasa pasiva. Esto coincide con la reducción que las reservas internacionales del Banco Central han mostrado a lo largo del año, empleadas para incrementar la oferta de divisas y controlar las presiones sobre el tipo de cambio. Sin embargo, esta actividad pudo haber causado una reducción de la liquidez, resultando en los incrementos en las tasas de interés, aunque los depósitos renumerados siguen relativamente bajos.
Cabe destacar la excepción del mes de julio, donde las reservas internacionales aumentaron significativamente, cerrando con un nivel de US$15,297.8 millones (máximo anual), coincidiendo con un aumento igual de significativo en los activos externos neto de la banca.
Por su parte, el petróleo ha estado presionado negativamente, debido a una reducción de la demanda global, principalmente por una desaceleración de la economía china (la mayor importadora de crudo a nivel mundial). Sin embargo, los precios están respaldados por la posibilidad de un aumento de las tensiones en el Medio Oriente y por una esperada reducción de tasas por parte de la Reserva Federal de los Estados Unidos y el Banco Central Europeo. Es poco probable que las presiones sobre el tipo de cambio provengan de variaciones de precios externos y posiblemente estén impulsado por factores especulativos.
En general, los indicadores macroeconómicos se mantienen estables, sin embargo, es necesario seguir observando el comportamiento de las fuentes generadores de divisas considerando el aumento inusual visto en el mes de julio.