Los sistemas económicos

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El significado de un sistema económico puede simplificarse al concepto de economía. Cuando escuchamos en nuestra vida diaria que una economía se comporta de tal forma, o está dirigida de tal manera, se está haciendo alusión a la estructura del sistema económico. De allí la importancia de entender su significado, y en esa misma medida entenderemos la economía en la cual nos desenvolvemos.

Un sistema económico es una estructura compleja, dispuesta de tal manera para que las sociedades organicen la producción de bienes y servicios, la asignación de recursos económicos, y, el intercambio y el consumo de esos bienes económicos. Los sistemas económicos comúnmente están diseñados para resolver problemas económicos, que pueden resumirse en tratar de responder a tres preguntas básicas: ¿qué producir?, ¿cómo producirlo? y ¿para quién? El objetivo intrínseco en responder a estas preguntas está en resolver una de mayor peso y complejidad: ¿cómo lograr la estabilidad y el crecimiento económico?

La forma en cómo se responden a cada una de estas interrogantes, define el tipo de sistema económico imperante en un país. En este sentido, se definen tres tipos básicos de sistemas económicos:

  1. Mercado libre: las sociedades sujetas a este tipo de sistemas comúnmente resuelven a las tres preguntas básicas de acuerdo a las leyes naturales del mercado, donde la libre oferta y demanda determinan el precio y el intercambio de productos y servicios. Estos sistemas son denominados puramente capitalistas, en los que existe propiedad privada tanto del capital como de los medios de producción, donde las empresas son libres para constituir o disolver negocios, y los individuos tienen la libertad de escoger entre los distintos productos que ofrece el mercado.

  2. Planificado o centralizado: las decisiones a las tres preguntas básicas son tomadas a través de una autoridad central, comúnmente el Estado, el cual posee la totalidad de los medios de producción, por lo que tiene la potestad de fijar precios e interferir en la libertad de los ciudadanos de decidir qué comprar. Generalmente este tipo de sistemas está asociado a países comunistas o socialistas.

  3. Sistemas mixtos: las economías de este tipo son un híbrido entre una economía de mercado y una economía planificada. En este tipo de sistemas los medios de producción se encuentran tanto en manos privadas como públicas. Comúnmente cuando el control solo proviene de una de las partes, suelen existir fallos en el mercado, que solo pueden ser corregidos en sistemas mixtos, donde si bien existe economía de mercado, el intervencionismo del Gobierno hasta cierto punto puede corregir los fallos y evitar o suavizar los ciclos económicos.


En la actualidad, la mayoría de los países se basan en sistemas mixtos, donde el sector público colabora con las iniciativas privadas, sobre todo para lograr el crecimiento económico a través del desarrollo de industrias de alta tecnología donde la inversión privada resulta crucial. Adicionalmente un sistema mixto incorpora consideraciones sociales amplias que permiten lograr el desarrollo sostenible de una sociedad.

No obstante, pareciera que muchos países, particularmente los de América Latina, desde hace una década hasta la actualidad han presionado para implementar sistemas centralizados, que si bien han funcionado para países desarrollados, no necesariamente han tenido el mismo efecto para quienes lo implementan a la fuerza, y que con esa misma fuerza oprimen a los ciudadanos para mantenerse en el poder.